RECIBIENDO MAS...

CUANDO MENOS SE ESPERA...

gotitas de vivencia...

En medio de muchos momentos incomprensibles, atravesando momentos muy duros, que no he entendido porque han sucedido, el perder momentáneamente muchas comodidades me hiso pensar cada vez más en que cuando no queda nada...Dios siempre está ahí...fue momentánea la prueba, y en medio del silencio aquel, leía aquel hermoso libro del pastor Benny Hinn: "La Unción"... veía que muchas cosas que ese hermoso siervo había pasado por el precio de la unción, me fascinó aquella parte que explica que la unción en su vida se dividía en tres partes:La unción del leproso, la unción sacerdotal y la unción Regia...poco a poco, el Señor me hablaba a mi corazón a través de las páginas de este libro, me mostraba como la Gloria toda la gloria, se le da únicamente a El, y que no es cuanto te dedicas a hablar de El, sino cuanto tu hablas con el...puede ser que para muchos este libro sea algo que hace muchisimo tiempo leyó, pero a veces las palabras se vuelven nuevas por mas antiguo que sea el libro...en los momentos que muchos llaman desierto, yo le llamo, cuando Dios te está mostrando como confiar en El únicamente...como esperar y creer, y que duro puede llegar a ser un momento de arrebato y si su tan sola gracia no nos cubriera...fácilmente somos presa fácil...que importante son las armaduras espirituales y el revestirse de su poder cada día, cuando te das cuenta que todo es vanagloria y pasajero, que lo único que siempre queda es El...su bendita y grata presencia...ese es el momento más grande para mi vida...cuando despues de una tormenta viene la calma de Dios y puedo respirar, y confiar únicamente en El Gran Yo Soy...cuando se llega a estos momentos creo que ha valido la pena cada instante de incertidumbre, pues únicamente puedo concluir, que nada me interesa: ni ninguna fama, no espero reconocimientos de ninguna manera, no deseo nada más que darle mi vida entera a El como ofrenda...pues lo único que tengo para darle es mi vida entera: mi ser, mi alma, mi espíritu le pertenecen...en el estoy confiada, en el puedo descansar, el que me despierta en las madrugadas para hablarme y para hablarle, el que aquieta mi espíritu y me da la paz que sobrepasa todo entendimiento...Gracias mi Señor por hacerme pasar esta prueba...gracias por llevarme a los hermosos pastos para descansar...gracias porque esto ha pasado...a ti sea toda la gloria...toda la honra...y toda majestad...por los siglos de los siglos...amén

...por
...Cristina Hidalgo de Marroquín