SU VICTORIA...

ES TAMBIÉN NUESTRA...

gotitas de vivencia...

Jesús vino a este mundo, y su presencia hiso nuevas todas las cosas...su mensaje de amor, podia transformar todas las cosas en un instante...todo lo que el hizo no podría caber en libros que llenaran bibliotecas...su voz era tan potente, podia hablarle a multitudes sin necesitar de parlantes o un micrófono, su mensaje era preciso, sacudía los simientes de una vida en un instante...venció la enfermedad, reto la muerte resucitando a Lázaro, mostro que no sólo los pecados eran perdonados, también nos reveló que nuestras iniquidades podían ser rotas si renunciábamos a ellas...pero su máxima victoria fue vencer la muerte a traves del amor y la obediencia...El siendo el mismo Dios, murió por nuestra causa y nos abrio las puertas a la vida eterna, no solo es por gracia, el poder de la muerte en la Cruz es más grande que lo que conocemos como gracia, venciendo a la muerte con su gloriosa Resurrección, nos dió la victoria para poder vencer...y así no podemos ser vencidos...el nos dio la llave para vencer el temor, el miedo, la soledad, la depresión, la angustia, la falta de amor, la falta de salud, la falta de amigos verdaderos, la falta de todo...en el amor de Dios no podemos vivir en temor...Jesús a traves de su sacrificio nos muestra el camino para poder tener una vida de victoria...el sacrificio máximo lo hiso El en la Cruz, su gloriosa resurrección nos muestra que todos los caminos de Dios son inexplicables pero gloriosos...ni los abismos se esperaban ese triunfo, los abismos se regocijaban porque habían tenido una batalla ganada, pero no se esperaban perder la guerra de esa manera... así, aunque a veces no se entiende porque se pasan distintos momentos, porque no llegan las respuestas o porque muchas veces no comprendemos lo que sucede...somos alineados a su justicia, a lo que Dios quiere que hagamos en la vida, después pulidos como el oro, podemos vencer y los problemas nos hacen mas fuertes, nos dan la madurez para entender muchas cosas...porque solo padeciendo desiertos, momentos de soledad y angustia muchas veces, podemos ser pulidos y así como Jesús...su victoria también es nuestra y siempre siempre siempre...con Dios a nuestro lado, la victoria es nuestra...

...por
...Cristina Hidalgo de Marroquín